5 de junio de 2007

El precio politico


ETA ha puesto fin a la idílica relación que parecía mantener con el gobierno. Anuncia el fin de la tregua además con aspavientos y culpando a Rodríguez en primera persona. A descaro nadie les gana. Aquí nunca hubo tregua porque se mató entre risa y risa. Lo que ha habido es una negociación larga, sangrienta, ilegítima e inútil. Para más señas lo ha dicho José Blanco: "No ha habido precio político", sin que nadie le pregunte. Excusatio non petita acusatio manifesta, que reza el proverbio latino. El descaro de este gobierno no tiene límite.

El último día del año pasado se nos dijo que el "proceso" quedaba roto, pero ahora nos dicen exactamente lo contrario: las negociaciones continuaron pero "no se ha pagado precio político". Todo para pedir ahora que perdonemos el error, un error que se atribuye oficialmente a ETA que es la que no suele errar, cuando de engañar a aspirantes al Nobel se trata. Por eso ETA no ha dudado en descubrir las cartas que venía jugando Rodríguez. Claro que yo no me creo nada de lo que digan los asesinos, pero esta vez era "blanco y en botella".

Ahora le va a tocar hablar a Rodríguez, no sólo en rueda de prensa, sino en el Parlamento y con el mismo bombo y platillo con el que abría las negociaciones con la banda armada. En aquella ocasión los terroristas le dieron alas con la declaración de "alto el fuego permanente". Rodríguez va a tener que entonar el "mea culpa" que se negó a recitar en Navidades a pesar de los muertos. Aunque a lo mejor me equivoco porque en El País preguntan a sus lectores “¿Crees que el Gobierno debe seguir intentando negociar la paz con ETA ?” . Yo me quedo con ese “seguir” acusador del propio grupo mediático socialista.

Entre las reacciones de los distintos partidos me parece muy significativa la del PNV que dice que esto es una “broma macabra”. En el partido vasco ya veía venir este desenlace y su discurso de unos meses a esta parte ha sido mucho más duro con la banda terrorista y su entorno que el del propio PSOE.

Guardan silencio en ANV, la secuela vergonzante -para Rodríguez- de Bastuna, ahora no tienen nada que decir son por cuatro años le testimonio vivo -y caro- del "proceso". Otegui visita a su amigo De Juana, liberado por acción u omisión del gobierno español. El domingo conocimos del macabro mailing de ETA extorsionando a empresarios -así era la "tregua"-, pero el aspirante al Nobel de la Paz miraba para otro lado. Ya hoy la televisión pública se ha apresurado a decir que la fiscalía pedirá que Otegui entre en la cárcel por enaltecimiento del terrorismo, pero la semana pasada fue Grande-Marlaska el que tuvo que actuar de oficio (Ver: http://www.terceravia.com/foro/viewtopic.php?t=116). Curiosidades de un "proceso" en el que "no ha habido precio político". ¡No ni ná!, que dicen en mi tierra.

Pero el verdadero precio político lo va a pagar aparentemente Rodríguez, al que entre los resultados de las municipales y el fin de la negociación con ETA le están dando demasiados malos ratos, así que mejor hablemos de economía.

3 de junio de 2007

Pan y circo en Venezuela


Uniformados, como si de un partido de la selección nacional se tratase, salieron ayer a la calle los adeptos de Hugo Chávez para gritar en apoyo de la decisión de cerrar –realmente es una no renovación de concesión- el canal de televisión Radio Caracas TV (RCTV). Los “pendejos”, como Facundo Cabral los denominaba en uno de sus formidables monólogos, pasaron por la oficina gubernamental correspondiente a recoger su uniforme y a firmar la consiguiente lista de asistentes para seguir cobrando de las migajas de los petrodólares. A cambio sólo tienen que salir a vociferar un rato.

Esto empieza a parecerse cada día más a las antiguas dictaduras romanas, pero al estilo bananero. Hagamos memoria. Ocurría en la Roma imperial que los césares, expoliando a los derrotados en las conquistas, empleaban los fondos para enriquecerse, contentar al ejército y mantener la paz en la capital del imperio. Así surgieron los repartos de alimentos en una Roma indolente y absolutamente improductiva, pero como el pan no bastaba, los césares programaban ambiciosos espectáculos para la masa desempleada. El fin último era tener a la masa contenta. Alimentada y entretenida, para ser más concretos. Así no reparaban en lo que ocurría en los contubernios consulares.

Lo mismo viene a suceder en Venezuela. El país vive un momento económicamente muy dulce gracias a los elevados precios del petróleo, los cuales no serán eternos o no lo son las reservas, que están reportando altísimos ingresos a las arcas estatales venzolanas. Estos fondos están teniendo la misma finalidad que la que los césares dieron a los botines de guerra y los impuestos de las provincias romanas: enriquecer a los que están cerca del poder y permitir que ese poder no tenga contestación contentando al pueblo y, seguramente, al ejército.

No es un secreto que Chávez anda repartiendo las sobras del botín petrolero entre los votantes para que se mantengan fieles, de ahí los espectaculares resultados de las últimas presidenciales. Claro que mientras el venezolano de a pie se compra una computadora, gracias al sueldo público, los cargos de confianza del “cónsul” se compran apartamentos de siete dígitos en dólares. Pero el pueblo no es ambicioso y se conforma con la “sopa boba”.

El circo en este caso lo aporta el propio presidente, el cual sale casi a diario a dar una función para las masas alimentadas. Nunca en Roma tuvieron ese lujo: un césar bufón. Ayer volvió a actuar para mandar “al carajo” a todo el que ha criticado su decisión de limitar la libertad de expresión, dentro y fuera del país. Con ese verbo grotesco que le caracteriza hablaba de la “derecha internacional”, en referencia a todos los mandatarios mundiales que no le han reído la gracia por cerrar RCTV, incluido su “aliado” Lula. Ni a Fidel Castro se le había ocurrido una expresión tan totalizadora: la derecha internacional.

Debe estar molesto el presidente de Venezuela ante la reacción interna y externa que ha tenido su última cacicada. Algunos de sus presuntos aliados le han criticado y en las calles de Caracas hemos vuelto a ver masas –no uniformadas, por cierto- criticando sus decisiones. Ante la evidencia del error ha tenido que recurrir a los recursos habituales: redoblar la ración de pan y dar una función de circo. Así que sacó a las gargantas agradecidas a la calle e insultó a todo el que no le ha seguido el juego en el asunto de la mordaza impuesta a un medio de comunicación privado.

Contento, en definitiva, se nos mostraba ayer el pueblo venezolano. Tiene su pan, circo presidencial y camiseta de manifestación gratis. Porque el uniforme que lucían ayer los manifestantes podrá no gustarnos, pero lo bueno que tienen los uniformes es que siempre son cortesía del poder.

1 de junio de 2007

La "voluntad del pueblo" va por barrios



Como ya se anunciaba en la noche electoral, la segunda fase de los comicios empieza ahora. Se trata de la ronda de pactos para lograr el poder. No hay demasiadas sorpresas en este sentido, aunque sí estamos empezando a ver a los partidos mayoritarios utilizar su doble discurso habitual. Antes del domingo el PP propuso que gobernase la lista más votada, pero el PSOE no quiso aceptar esa opción, así que guardó silencio sabedor de que ese “trato” le restaría mucho poder.

Pero parece que el PP no va a cumplir su propia propuesta y en Canarias podría apoyar la investidura de Coalición Canaria, segunda lista más votada, frente a la socialista. Hoy el candidato canario sin programa, Juan Fernando López Aguilar, ha dicho que “la voluntad inequívoca de los canarios es la del cambio”, en referencia a que la suya ha sido la candidatura con mayor número de votos en las Islas Afortunadas, y puede que tenga razón. López Aguilar lo que pide es que el PP cumpla lo que su partido no quiso aceptar, no quiere aceptar: que gobierne la lista más votada.

Por eso lo que cabe es decirle a López Aguilar que la voluntad de los sevillanos o de los asturianos también es la del cambio, pero no va a suceder porque su partido no lo va a permitir y va a gobernar en Sevilla y Asturias sin ser la lista más votada. Triste lo de López Aguilar, pero su discurso moralista no hace más que acusar a su propio partido. Porque el pueblo vota, pero los que pactan son los partidos, como ocurrió en Galicia o en Cataluña, en donde gobierna su partido gracias a los pactos y desplazando “la voluntad inequívoca” de los ciudadanos. El ex ministro, que festejó desde el gobierno, las derrotas de su partido en Cataluña y Galicia porque en realidad eran victorias gracias a los tripartitos con nacionalistas, ahora quiere que se aplique lo que él nunca quiso aceptar cuando las cuentas le eran favorables al PSOE.

El discurso de la “voluntad inequívoca del pueblo” tienen poca validez cuando viene de un dirigente político como López Aguilar. Porque para estos políticos nuestros lo que vale es el poder por el poder y la voluntad del pueblo es válida sólo cuando les conviene para dar discursos de doble moral.